La borrasca Hervé ha dejado vientos y rachas huracanadas en zonas del Mediterráneo, especialmente en la isla sa de Córcega. La profunda borrasca situada en el centro de Europa generó un fuerte gradiente de presión agudizado por los efectos orográficos locales de Córcega.
Con Hervé llegó el descenso acusado de temperaturas en Francia y noreste peninsular. Las nevadas fueron copiosas en los Alpes.
Además, se ha generado un incendio en la Isla de Córcega, que con el fuerte viento ha desarrollado un largo y fino penacho de humo, como se observa en las imágenes de Terra.
La zona es de difícil y las rachas de viento del orden de 130 km/h hicieron que la lucha contra el fuego fuera muy complicada.
La borrasca Hervé es ya historia.