El anticiclón cálido que nos afecta y que actúa como murallón a la llegada de borrascas y precipitaciones, tiene los días contados. Hoy y mañana, 11 y 12 de octubre, estaremos bajo su radio de acción con tiempo cálido, seco y estable en toda España y , especialmente, en Canarias con muy altas temperaturas, verdadera ola de calor en otoño.
Se espera que un frente y una borrasca comiencen a afectar al noroeste peninsular y zonas de las regiones cantábricas, el 13 de octubre. Las temperaturas comenzarán a descender poco a poco desde el noroeste hasta el resto de España, aunque serán altas en las zonas del Mediterráneo, Baleares y Canarias.
Los vientos de componente norte y noroeste, que traerán un descenso acusado de temperatura en gran parte de Europa, pero no afectarán a España salvo el tercio norte. Todo ello será debido a la pulsación de borrascas situadas al oeste de la Península que inyectarán aire suave y húmedo de componente este suroeste e impedirán la llegada del aire fresco del norte. Estas borrascas, no sólo nos librarán de la primera pulsación fría otoñal, nos traerán precipitaciones abundantes y generalizadas de origen atlántico subtropical.
Las borrascas de bajas latitudes irán enganchando lenguas de altas concentraciones de humedad (ríos atmosféricos) e impactando sobre Península y Canarias
Desde el viernes,13 de octubre en adelante, veremos pasos de borrascas, frentes y precipitaciones que harán bajar las temperaturas tan altas y nos dejarán los termómetros con valores más suaves y lluvias tan necesarias.
El paso de borrascas atlántica cargadas de humedad dejarán precipitaciones en amplias zonas de España y, en menor medida, en el sureste peninsular.
El cambio de tiempo y las lluvias podrían afectar a Canarias, que están sufriendo un periodo muy seco y auténtica ola de calor en pleno octubre.
Tendría que llover mucho de forma continua y generalizada durante muchos días, e incluso meses, para que el déficit de precipitación de llevamos padeciendo para acabar con la larga sequía que padecen muchas regiones españolas. Estas lluvias venideras permitirán regar el campo, limpiar el aire, bajar las anómalas temperaturas y aliviar parte de dicha sequía. Y eso es mucho.