El término tormenta solar puede evocar imágenes de un fenómeno natural lejano e inofensivo, pero la realidad es que, si bien no ocurre todos los días, las tormentas solares son un evento real y potencialmente devastador que podría afectarnos en cualquier momento.
Aunque la humanidad ha experimentado tormentas solares en el pasado, ninguna se compara con lo que ocurrió hace 14.300 años, cuando la Tierra fue testigo de la tormenta solar más grande jamás registrada.
Un equipo de científicos han llegado a esta impactante teoría basada en el estudio de anillos de árboles y registros geológicos. Sostenían que hace 14.300 años, la Tierra experimentó una tormenta solar catastrófica, causada por una eyección de masa coronal (CME) masiva del Sol. Esta tormenta solar habría sido tan intensa que habría dejado huellas en el medio ambiente y en la historia de la humanidad.
Investigadores identifican la mayor tormenta solar más jamás registrada en los anillos de árboles que vivieron hace 14.300 años, en lo que hoy son los Alpes ses. https://t.co/eS3OaunbVM pic.twitter.com/hwQSbRb4cu
— Enrique Coperías (@CienciaDelCope) October 9, 2023
Los investigadores creen que esta tormenta solar antigua tuvo un impacto profundo en la Tierra y sus habitantes. Los niveles de radiación aumentaron significativamente, y las temperaturas globales descendieron, causando un drástico cambio en las condiciones climáticas.
Esto, a su vez, afectó la supervivencia de las civilizaciones de la época y posiblemente contribuyó a la extinción de varios mamíferos gigantes. Los científicos creen que esta gran tormenta solar recién identificada es la más grande jamás encontrada: aproximadamente el doble del tamaño de los Eventos Miyake conocidos hasta ahora.
Entonces, ¿qué pasaría si una tormenta solar similar nos golpeara en la actualidad? En la actualidad, nuestra sociedad está altamente dependiente de la tecnología y las redes eléctricas.
Una tormenta solar de tal magnitud tendría un impacto devastador en nuestras vidas. Aquí te explicamos algunas de las posibles consecuencias.
Una tormenta solar intensa puede causar daños significativos en las redes eléctricas. Los transformadores y las líneas de transmisión serían particularmente vulnerables, lo que podría resultar en apagones masivos y prolongados.
Las comunicaciones modernas, incluyendo satélites, sistemas de navegación por GPS y redes de telefonía móvil, se verían gravemente afectadas.
#ClimaEspacial | 28 de Agosto de 1859: la Tierra estuvo 14 horas con la red de telégrafos caídos más afectaciones en la electricidad por la tormenta solar más fuerte registrada. El 23 de Julio de 2012 nos salvamos por 9 días. Si nos tocan ahora chao luz, GPS e Internet. pic.twitter.com/3x1riY5HyJ
— +Spock::: (@SpockWeather) January 18, 2023
Esto tendría un impacto inmediato en la infraestructura crítica y en la capacidad de respuesta en caso de emergencia.
Los dispositivos electrónicos y los sistemas de información también serían vulnerables ante un evento de estas características.
Los es solares, los sistemas de navegación por satélite y los dispositivos electrónicos en general podrían verse afectados por la radiación solar intensa.
La radiación solar intensa durante una tormenta solar puede representar un riesgo para la salud de las personas, especialmente para aquellas que se encuentren en vuelos comerciales de larga distancia o que trabajen en la industria aeroespacial.
Los efectos combinados de los efectos dañinos en las infraestructuras, la interrupción de la comunicación y la pérdida de la tecnología podrían tener un impacto económico catastrófico, con consecuencias a largo plazo en la economía global.